Un derrumbe interrumpió el paso entre Santa Cruz Chinautla y la colonia Santa Luisa, zona 6 de ese municipio, por lo que personal de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) evalúa el área para determinar el nivel de riesgo para los vecinos.
Los vecinos refieren que la tierra comenzó a desprenderse desde el viernes 19 de octubre. La vivienda contigua al derrumbe fue desocupada, los vecinos aseguran que por momentos escuchan retumbos.
Los residentes del lugar deben pasar por un pequeño camino a la orilla del derrumbe. Las autoridades de la Conred recomiendan no pasar por el sector para evitar algún incidente.
La alcaldesa de Chinautla, Elizabeth del Cid, indicó que personal de Covial ya efectuó los estudios en el área y la próxima semana se reunirán para discutir las propuestas para reparar esa tramo.
“Afortunadamente no viven muchos vecinos por ese lugar y la familia que estaba en riesgo desocupó la vivienda voluntarimente”, acotó.
Federico Ruiz, vecino del sector, indicó que el viernes 19 de octubre a las 21 horas escucharon cuando se comenzó a desprender la tierra y esto provocó alarma.
“Nos afecta mucho esto porque con otras personas repartimos pan en otras comunidades y pasar con canastos por ese lugar es peligroso, solo ahorita pasamos como diez canastos con pan”, lamentó.
Alerta
Recientemente la Conred emitió un informe sobre el riesgo que corren las familias que residen en la 12 avenida y 29 calle de la colonia Santa Fe, zona 13 capitalina, debido a que la lluvia y las tuberías rotas han provocado la erosión del suelo y constantes derrumbes en el barranco.
Los vecinos aseguran que las vibraciones en la tierra son perceptibles desde el 2017.
Terreno inestable
Según la Conred, en la metrópoli hay unos 300 asentamientos, la mayoría ubicados en laderas y barrancos de las zonas 1, 3, 6, 7, 18 y 21.
El vocero de esa dependencia, David de León, manifestó que todos los asentamientos se consideran zonas de riesgo, ya que las condiciones para ubicarse no son las adecuadas.
“En algunos casos existe inclinación del terreno arriba de los 15 grados, por lo que ya no se considera seguro. A eso le agregamos que no existen drenajes o servicios básicos”, espuso De León.
De acuerdo con un informe del Centro de Estudios Urbanos y Regionales (Ceur), en 16 años la población en el departamento de Guatemala aumentó el doble, ya que, según los cálculos, en el 2002 había dos millones 541 mil 581 habitantes, mientras que este año la cantidad ha subido a cuatro millones 339 mil 429.