DATO CURIOSO: Sabías que el nombre “Halloween” viene del antiguo “All hallow’s eve”, en español, víspera de todos los santos. Una celebración que se puede relacionar a la del “Día de los Muertos” que se festeja en Honduras el 2 de Noviembre.
1- Casa embrujada en Santa Rosa de Copán
La famosa casa embrujada de Santa Rosa, como se le conoce popularmente, es una edificación de varias habitaciones construida sobre una colina, a orillas de la carretera que conduce a la ciudad de Santa Rosa de Copán, zona occidental del país.
Existe la creencia que la casa está maldita y por eso hace mucho tiempo se encuentra abandonada. Se dice que nadie puede vivir en ella porque el que se atreve a hacerlo o simplemente la visita muere misteriosamente dentro de ella.
Los vecinos aseguran que por las noches, de la casa salen ruidos extraños y terribles lamentos que no les permite conciliar el sueño. Esto refuerza la triste historia que se dice sucedió en la casa.
Se afirma que en su interior murió un sacerdote y varios niños que estaban a su cuidado, nadie sabe como murieron, ni quienes eran o si les dieron cristiana sepultura. Nadie tiene información confiable ni existe reporte policíaco que confirme la historia, sin embargo la gente sigue creyendo en la historia y la sigue repitiendo.
2- Mansion abandonada en San Pedro Sula
La construcción de la enorme casa ubicada en la coordillera del Merendon, dio inicio hace más de 20 años, pero informan los celadores del lugar que el propietario quedó en quiebra y no pudo terminar de construirla.
Un testigo relata que en una ocasión acudió a la mansión alrededor de las 20:00 horas y que un temor se apoderó de su cuerpo, asegurando que vio al mismo diablo caminando por los pasillos del lugar.
Algunas personas aseguran sentir presencias extrañas y también escuchar voces extrañas.
3- Cementerio de Comayaguela
Los celadores aseguran escuchar llantos, quejidos y todo tipos de sonidos en horas de la noche. Se han encontrado al menos 6 personas fallecidas en el lugar donde se rumora que pudo haber sido un infarto por el susto.
Constantemente sienten la presencia de espíritus penando en el área.