San José, 22 ene (EFE).- El Gobierno de Costa Rica rechazó este martes una nota de protesta de Nicaragua acerca de la supuesta operación en territorio costarricense de un grupo que atacó policías nicaragüenses, y advirtió de un intento de crear problemas “artificiales” para “desviar la atención” de la crisis que vive ese país.
“Ante la grave crisis política y social que desde abril pasado vive Nicaragua, Costa Rica advierte sobre todo intento de crear artificiales problemas o controversias como medio para desviar la atención”, expresó la Cancillería costarricense en un comunicado.
La misiva oficial indica que la nota de protesta de Nicaragua “genera dudas sobre su intención”, pues antes de ser remitida oficialmente a Costa Rica, fue enviada a “un grupo numeroso de países, organismos internacionales y agencias de cooperación con su respectiva traducción al inglés”.
“Por ello, Costa Rica rechaza no sólo la protesta hecha por Nicaragua y los hechos alegados, sino además cualquier intento por parte del Gobierno de Nicaragua de utilizar esta situación para sus propios fines”, señaló el Gobierno costarricense.
El documento agrega que “causa sorpresa que a pesar de que existen mecanismos binacionales para tratar una situación como la supuestamente denunciada por Nicaragua en su nota, se haya escogido obviarlos para darle preeminencia a un efecto mediático internacional a gran escala”.
El pasado 19 de enero el gobierno de Nicaragua informó que envió una “enérgica protesta” a Costa Rica por acoger en su territorio a una presunta banda de delincuentes que habría asesinado a cuatro agentes policiales nicaragüenses y herido a otros tres.
Los agentes del orden patrullaban en un sector del municipio nicaragüense de San Carlos, en el sur de Nicaragua, cuando fueron atacados “cobardemente con armas de fuego por la agrupación delincuencial conocida como Banda el Jobo, que comete delitos de asalto, narcotráfico y robo de ganado, desde su base en Costa Rica”, señaló la Policía Nacional de Nicaragua en un comunicado.
En su nota de este martes, el Gobierno de Costa Rica rechazó “cualquier sugerencia en cuanto a la posibilidad de que Costa Rica tenga responsabilidad” en esos hechos.
Y recalcó que “un grupo insurgente nicaragüense mediante un vídeo de dominio público se atribuyó la responsabilidad del ataque” ocurrido “a 12 kilómetros de la frontera con Costa Rica”.
“Por ello, existen serias dudas sobre la autoría del lamentable ataque, su propósito y otras circunstancias que lo rodean”, sostuvo al Cancillería costarricense.
Debido a las protestas en contra el Gobierno de Daniel Ortega, Nicaragua sufre una grave crisis que ha dejado 325 muertos desde abril, de acuerdo con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), aunque algunos grupos elevan a 561 las víctimas mortales, mientras que el Ejecutivo solo reconoce 199 y denuncia un intento de golpe de Estado.