Las fuerzas antimotines se apostaron de nuevo ayer en las afueras de los juzgados de Managua tras casi cinco meses de ausencia. Dejaron de llegar el 27 de febrero, cuando el régimen empezó a excarcelar a los presos políticos.
Adentro del complejo judicial se realizan audiencias contra los nuevos reos políticos que la Policía ha capturado en los últimos meses, en diferentes departamentos del país, y los procesan por delitos comunes, según han explicado abogados y familiares de estos. Entre los enjuiciados ayer lunes estuvo Carlos Sebastián Cortés, preso político de Carazo, a quien acusan de tenencia y fabricación de armas de uso restringido y estupefacientes.
“Fue capturado el 16 de mayo y lo acusan de tenencia de armas restringidas. Él estuvo escondido, luego exiliado y cuando regresó lo capturaron y lo acusan por delito común”, dijo Maynor Curtis, abogado defensor de presos políticos.
La causa contra Cortés se ventila en el Juzgado Cuarto Penal de Juicio de Managua y el próximo viernes inicia el juicio, detalló el abogado.
Otra audiencia que se desarrolló ayer es la de Lesther Renato Ruiz Narváez, de Jinotepe, por tráfico de armas. Su hermana Karen Ruiz expresó que toda su familia apoyó las marchas sociales contra el régimen de Daniel Ortega.
Ruiz fue capturado el 16 de mayo en Jinotepe a las 4:30 de la mañana en su casa de habitación, de donde se le llevaron 600 dólares y su moto. “Lo tuvieron detenido tres días y lo soltaron diciendo que era equivocación. Luego llegaron el 19 de mayo y le dijeron que fuera a traer sus pertenencias a la delegación y ya no lo volvimos a ver y lo trasladaron al Chipote”, denunció su hermana.
Ahora lo acusan de tráfico de armas y de droga, en el Juzgado Cuarto Distrito Penal de Juicio.
En las afueras de los juzgados también estuvieron familiares de Edward Enrique Lacayo Rodríguez, conocido como la Loba, quien es procesado por el orteguismo como reo común por delitos relacionados con narcotráfico. Fue detenido el 15 de marzo en la comunidad El Ostional, en Rivas, donde supuestamente llevaba unos paquetes de droga en una mochila. Su mamá, Estela Rodríguez, ha negado todo el tiempo la acusación.
“Después que lo golpearon el 2 de julio, lo trajeron a los juzgados pero suspendieron la audiencia. Hoy -ayer-veremos qué dicen”, dijo Rodríguez.
La tensión para los familiares de los presos políticos aumenta frente a los juzgados de Managua no solo por la presencia de antimotines sino también con la presencia de parapoliciales vestidos de civil que les hacen fotos y videos.
La presencia de antimotines de la Policía Orteguista en los alrededores de los juzgados empezó en julio de 2018, cuando llegaban acusaciones contra los autoconvocados. Los familiares y manifestantes se plantaban frente a este edificio público a reclamar la libertad para ellos.
La idea era disolver cualquier protesta contra el régimen orteguista, incluso perseguían y se llevaban presos a los jóvenes que llegaban a pedir libertad para sus amigos, padres y hermanos.
FUENTE: Hoy!