Rolando López, exsecretario del Consejo de Seguridad (CS), admitió al Tribunal que juzga al expresidente Ricardo Martinelli por pinchazos, que le prestó su computadora personal al testigo protegido de la Fiscalía para que éste grabara la información sensitiva que había extraído del correo electrónico [email protected] en un dispositivo que después se empleó como evidencia durante el juicio.
Esta información cobró beligerancia durante el juicio contra el expresidente Ricardo Martielli de este lunes cuando la querella inició la evacuación de sus testigos, en la mira tenía precisamente a López y al expresidente Juan Carlos Varela.
La versión de López, no obstante, contrasta con la del testigo protegido de la Fiscalía quien compareció durante el mes de junio por espacio de dos semanas. En su declaración reiteró en varias ocasiones que fue él mismo quien grabó esta información sensitiva desde su computador en el disco compacto que posteriormente entregó a la Fiscalía. Recordó que lo hizo en un hotel de la localidad del cual no logró mencionar el nombre o cuánto había pagado por la habitación en la que se hospedó por unos días en su viaje a la ciudad.
Según López cuando ingresó al Consejo de Seguridad como director y comenzó con la averiguación de lo que había ocurrido ahí antes de su llegada, los pinchazos telefónicos, un subalterno se le acercó y le comentó sobre un colaborador que quería aportar material a la justicia pero no quería hacerlo desde su computadora “porque las máquinas del Estado tenían un programa que estaba implantado por Martinelli”.
La respuesta de López fue que él le facilitaba su computadora para hacer la tarea, “por eso va a salir mi nombre en el renglón de propiedades”, narró López tratando de justificar la razón por la que en el disco compacto que empleó la fiscalía durante el juicio para mostrar al testigo protegido los correos y conversaciones de las víctimas de los pinchazos, salió a relucir el nombre de su nombre como autor de los mismos. Es decir, el nombre del autor o usuario de la computadora donde se había grabado la información.
El 18 de junio, fecha en la que en la audiencia sorprendió el nombre de Rolando López como autor de varios correos, el testigo protegido no supo dar una explicación al tema. Solo se limitó a responder que desconocía la razón por la que aparecía ese nombre en el disco compacto. Pero al mismo tiempo aseguró al Tribunal que él mismo había grabado el material en su computador. En ningún momento indicó que se trataba de un equipo prestado o que lo había conseguido por medio de un tercero, como afirma ahora López.
López reiteró en dos ocasiones que fue él quien le otorgó su computadora al testigo protegido y que “lo volvería a hacer de ser necesario”.
“Nos parece que quedan claros muchos elementos. Rolando dijo que alguien le mencionó que había un colaborador que tenía intención de colaborar con la justicia o dar información y él le entrega una laptop personal y por eso aparece su nombre ahí. Este elemento para nosotros es importante y afortunadamente la querella aporta ese testimonio, hay un colaborador que no quiere utilizar los dispositivos del Consejo para hacer el volcado”, explicó el fiscal Ricaurte González la contradicción.
Desde su ingreso
López acudió al juicio como parte de los testigos de la querella. El abogado David Cuevas, defensor de Rosendo Rivera, querellante, víctima y exabogado del exmandatario Martinelli, interrogó a López por espacio de dos horas.
Pasadas las nueve de la mañana el Tribunal dio la orden de que ingresara el testigo de la querella que había sido previamente anunciado. López, vestido de traje oscuro, zapatos negros, camisa blanca y corbata, ingresó a la sala de audiencia sin mirar a ningún otro lado más que la silla que ocuparía frente al Tribunal.
FUENTE: La Estrella de Panamá