Redacción
Las cuatro manzanas que tenía cultivadas con maíz y frijoles las perdió don José Ernestino García Flores, quien habita en la comunidad de Cuje, del municipio indígena de Totogalpa, zona del departamento de Madriz. La falta de lluvia en la zona de Las Segovias que comprende los departamentos de Estelí, Madriz y Nueva Segovia, fue una de las causas de las pérdidas en la cosecha de primera.
Esta realidad la viven muchas familias de esta zona del país. “Ni para la semilla nos quedó, entonces de dónde vamos a sacar para comprar nuevamente las 60 libras de semilla de maíz y frijol que se necesita por manzana a sembrar, porque ni para la comida sacamos”, expuso el pequeño productor.
José Ernestino detalló que para la siembra de primera de las cuatro manzanas necesitó 48 mil córdobas, es decir invirtió unos 12 mil por manzana, los cuales utilizaron para la compra de semillas y abono entre otros gastos.
“Para obtener ese dinero vendimos tres vaquillas paridas en 23 mil córdobas las tres, y un buey que apenas me dieron 12 mil córdobas, y que al final todo lo perdimos, ya que aquí ni llovió y nos quedamos peor que antes”, señaló el productor.
“Vea amigo, yo estoy pensando irme a trabajar con toda mi familia (cuatro hijos cuyas edades oscilan entre los 6 y 12 años, y su mujer) ya sea a Honduras, El Salvador y ya por último a Costa Rica y dejar botado estas tierras, porque no sirven de nada si nadie aquí te apoya”, expuso.
Sin apoyo
Al igual que don Ernestino García Flores, la gran mayoría de las familias campesinas de los 28 municipios de los tres departamentos de Las Segovias no obtuvieron este año crédito bancario ni de las microfinancieras ni mucho menos apoyo del actual régimen.
HOY / William Aragón
Por su parte, el productor Jorge José Tercero Rodríguez, de una de las comunidades del municipio de Ciudad Antigua, en Nueva Segovia, dijo que la mayoría de los productores de esa zona perdieron la siembra de primera.
“Ahora estamos esperando obtener una cosecha moderada de maíz y frijol para recuperarnos en esta postrera que sale a finales de octubre”, expuso.
Saturnino Hudiel Fuentes, de la comunidad La Laguna, en San Nicolás; don Gordiano Valdivia, de la comarca de Llano Redondo, y Juan Rizo, de la comarca La Ceiba, ambas en la comunidad de Santa Cruz, zonas del departamento de Estelí, afirman que por el alto precio de los insumos, la inestabilidad de las lluvias y la falta de financiamiento muchos campesinos de estos lugares reducirán el área de siembra para la postrera.
La caída en los precios del frijol y el maíz agravó la situación en el campo. Algunos productores indicaron que el quintal de frijoles lo están vendiendo entre mil y mil 150 córdobas, cuando el precio anterior era de mil 350 y mil 400 córdobas. En el caso del maíz el precio por quintal al productor es de unos 600 córdobas, el costo anterior oscilaba entre 800 y 900 córdobas.
HOY / William Aragón
Pero no solo los productores de granos básicos tienen problemas, “también los hortaliceros hemos reducido hasta en un 70 por ciento la producción en comparación con los años anteriores”, se lamentó Alí Blandón Navarrete, el mayor productor de papas de la comunidad Los Jobos, zona de Estelí.
Según datos recientes filtrados por funcionarios de la oficina del Ministerio Agropecuario (MAG) en Madriz, en la pasada siembra de primera, unos 13 mil 600 productores resultaron afectados por la pérdida de gran parte de sus siembras por la ausencia de lluvias regulares que se extendió con la entrada de la canícula, lo que fue notorio ante la reducida sacada de la cosecha de las comunidades donde tradicionalmente se cultiva maíz, frijol y millón.
El pastor Medardo Chavarría, de la iglesia Getsemaní, en San Nicolás, dijo que muchos jóvenes emigraron por temor a la represión del gobierno.
“En el área rural muchas familias están viviendo de las remesas y poco a poco los productores están dejando de trabajar la tierra, hay poco relevo generacional”, explicó.
FUENTE: Hoy!
