Los cubanos podrán solicitar un carné de comprar para ingresar a territorio panameño, según un comunicado publicado este lunes por el Servicio Nacional de Migración Panamá (SMP). El documento se expedirá en el consulado de este país istmeño en La Habana, tendrá un precio equivalente a $20 y permitirá una estadía de 30 días.
“Nuestros consulados están saturados por el interés de visitar a Panamá para compras y turismo”, por lo que “decidimos flexibilizar la política migratoria con Cuba”, dijo el presidente panameño, Juan Carlos Varela.
Para adquirir el carné de compras los cubanos deben presentar su identificación como cuentapropistas, o en su defecto un certificado de que laboran como creadores o artesanos. Un requisito imprescindible es el haber viajado anteriormente a Panamá o a otro país.
Los cubanos que cuentan con una visa panameña no necesitarán el carné de compras. Panamá otorga unas 1,000 visas estampadas cada mes a ciudadanos de la isla y en lo que va del 2018 se contabilizan más de 35,900 entradas a Panamá provenientes de Cuba. El pasado año fueron más de 71,700, una cifra muy superior a la del 2010, cuando apenas viajaron 6,000.
El país istmeño es una de los más importantes destinos para las llamadas mulas que se dedican a importar a la Isla ropa, calzado, medicamentos y electrodomésticos para revenderlos en el mercado negro, una forma de aliviar el desabastecimiento crónico de la red de tiendas nacionales.
Según The Havana Consulting Group (THCG), una firma de negocios radicada en Miami, los emprendedores cubanos sacaron de la isla en el 2017 cerca de $2,390 millones, nueve veces más que el capital extranjero invertido en la zona Especial de Desarrollo del Mariel, una de las grandes apuestas del gobierno cubano. Muchos cubanos han obtenido la residencia permanente en Estados Unidos, Panamá, República Dominicana y España, lo que les permite acceder a créditos y crear cuentas bancarias en moneda fuerte, agrega Emilio Morales, director de THCG.
Un dato llamativo es que muchos de los emprendedores cubanos se han hecho residentes en EEUU, Panamá, República Dominicana, Ecuador o España, lo que les ha permitido “asentar una base legal en dichos mercados donde pueden tener un negocio, cuenta bancaria y acceder a créditos”.
De los $2,390 millones, $1,008 millones se invirtieron en compra de mercancías, mientras que unos $366 millones se invirtieron en bienes raíces y otros negocios, dijo.
El Servicio Nacional de Migración también anunció este lunes que creó la Oficina de Asuntos Humanitarios para los Residentes Venezolanos. A través de esa entidad, los venezolanos residentes legales en Panamá podrán solicitar la “reagrupación familiar” por razones humanitarias para aquel familiar que se encuentre dentro del cuarto grado de consanguinidad y segundo de afinidad.
Los venezolanos podrán solicitar visas estampadas desde Panamá para sus familiares en Venezuela. Los interesados en el trámite de reagrupación familiar deberán presentar una copia del pasaporte, copia del carnet de residente en Panamá, prueba de parentesco con la persona que se quiere reclamar, una prueba de solvencia económica, una carta de responsabilidad y una prueba de domicilio en Panamá.
Las visas serán estampadas en el consulado de Panamá en Venezuela. El Servicio Nacional de Migración de Panamá ha reportado el pasado octubre un descenso en el número de venezolanos que llega al país. Según estadísticas oficiales han llegado unos 2,000 venezolanos menos desde que Panamá exigió visado a los ciudadanos venezolanos. Durante este año se han aprobado 3,800 visas para venezolanos y se negaron más de 1,600, explicó el SNM.