En un mundo cada vez más difícil de comprender, en el que los progresos de años recientes se ven eclipsados por preocupantes acontecimientos como el auge de grupos y líderes que cuestionan abiertamente los estándares democráticos y e incluso los derechos y dignidades básicos de las personas, la distopía se ha convertido en un género de gran éxito entre lectores y televidentes de todo el mundo.
Para los amantes de este tipo de ficciones, el 5 de noviembre no es un día cualquiera. Esta fecha, aparentemente sin importancia entre los festivos y otros días destacados de la temporada otoñal, es uno de los elementos más icónicos de la ya clásica “V de Vendetta” (V for Vendetta, en inglés, que fue traducida como “V de Venganza” en algunos países latinoamericanos), película dirigida por James McTeigue y estrenada en 2005. Aunque la historia original es unas décadas más antigua: el filme está ambientado en la novela gráfica homónima de Alan Moore y David Lloyd, que apareció a modo de serie de comics entre 1982 y 1988.
Un plan: explosionar el Parlamento en nombre de la libertad
En la cinta, ambientada en un hipotético futuro a la vuelta de la esquina, Reino Unido se ha convertido en un Estado totalitario de corte fascista y un hombre al mismo tiempo extravagante, tierno, amargo e intelectual intentará liberar a la ciudadanía de las garras del totalitarismo. Su plan maestro: hacer saltar por los aires el Parlamento.
“Recuerda, recuerda, el 5 de noviembre…”, recita el personaje de “V”, una suerte de mosquetero cuya máscara dio la vuelta al mundo al ser adoptada por el movimiento Anonymous, que desde 2008 ha llevado a cabo diferentes iniciativas y acciones de protesta en defensa de la libertad de expresión y de los ideales anarquistas, tanto dentro como fuera de internet.
¿Por qué este día? Lejos de tratarse de una elección caprichosa, los planes de “V” hunden sus raíces en la historia británica: es el aniversario de la conspiración de la pólvora, un complot fallido contra la aristocracia protestante del reino. Un grupo de provinciales católicos ingleses pretendía hacer explotar las Casas del Parlamento londinenses durante una ceremonia que tenía lugar el 5 de noviembre, pero finalmente el descubrimiento a tiempo de la conspiración permitió que la dinastía protestante de los Estuardo no fuese derrocada.
A día de hoy, diversos países de la Commonwealth, entre ellos Reino Unido, Canadá y Sudáfrica, así como algunas partes de Estados Unidos, celebran la efemérides como la Noche de Guy Fakes, uno de los protagonistas de la conjura, el cual finalmente fue condenado a muerte.
Un icono de resistencia ciudadana
Desde su aparición, la película se ha convertido en un símbolo de resistencia contra el totalitarismo y los gobiernos antidemocráticos. Como cada año, en la jornada de este lunes (05.11.2018) las redes sociales se han inundado con célebres citas y referencias del filme. “Mi padre solía decir que los artistas mienten para decir la verdad, mientras que los políticos mienten para ocultarla”, dice en la película Evey, interpretada por Natalie Portman. Las rotundas afirmaciones de “V”, personaje que Hugo Weaving, son algunas de las referencias más repetidas: “El pueblo no debería temer a sus gobernantes; son los gobernantes los que deberían temer al pueblo”.
Aunque la película recibió igualmente fuertes críticas, especialmente de los sectores más conservadores e incluso de grupos cristianos, no hay año que no vuelvan a resonar en las grandes y pequeñas pantallas las palabras de “V”: “Recuerda, recuerda, el 5 de noviembre…”. Especialmente en una época en la que los rivales de la democracia y los derechos humanos parecen estar de moda.