El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) compartió con el Estado de Honduras una serie de recomendaciones para mejorar la respuesta inmediata en un millar de casos conocidos y registrados en instancias nacionales e internacionales, de personas que han sido obligadas a desplazarse de ciudad en ciudad, debido a las amenazas de grupos delictivos, violencia generalizada en el territorio nacional y falta de oportunidades para generar ingresos para subsistir.
Según datos preliminares del nuevo “Estudio de Caracterización de Desplazamiento Interno en Honduras, aproximadamente 247 mil personas se desplazaron entre 2004 y 2018 equivalente al 2.7 por ciento de la población hondureña a nivel nacional.
De acuerdo a datos del Observatorio Global sobre Desplazamiento Interno en 2018, cerca de 40 millones de personas se vieron desplazadas por conflictos armados y la violencia en el interior de su país y Honduras se ubica entre las cuatro ciudades del mundo.
Es un avance en Honduras que el Congreso Nacional haya recibido el proyecto de Ley para la Prevención de Atención y Protección de las Personas Desplazadas Forzadamente, como una respuesta oportuna en materia humanitaria.
El jefe de la misión del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Alexandre Formisano, detalló que al realizar el estudio existía un interés particular de incluir a Honduras, porque es el único país que ha reconocido el fenómeno del desplazamiento interno en la región.
Para la ministra de derechos humanos, Karla Cueva, este estudio ayudará a buscar soluciones que el Comité ya propone y reconoce que “no nos quedemos con las estadísticas frías que nos muestran los estudios, a cada número hay que ponerle cara, hay que ponerle nombre”.
Por su parte, Ángela Cotroneo, asesora global sobre Desplazamiento del CICR explicó que uno de los principales propósitos del estudio es comprender mejor la experiencia de las personas desplazadas en entornos urbanos y reflexionar sobre la respuesta humanitaria y cómo fortalecer esta respuesta. (SA)
Fuente: La Tribuna