El tráfico vehicular del centro de San Salvador se complicó este lunes 13 de mayo ante el cierre de las calles de los alrededores del Palacio Nacional, en donde comenzaron los preparativos para el acto de toma de posesión, a desarrollarse el próximo 1.º de junio.
Agentes de la División de Tránsito de la Policía Nacional Civil (PNC) colocaron conos para restringir el paso de los automovilistas en la 1a. Calle Poniente y Avenida España hasta la 4a. Calle Poniente y Avenida Cuscatlán, así como un tramo de la calle Rubén Darío y la Plaza Hula Hula.
El sector fue cerrado la madrugada del lunes y permanecerá así por 20 días. La medida tomó por sorpresa a los automovilistas y transeúntes.
Inicialmente, se informó que el cierre de la zona era por un ensayo del acto de traspaso de la presidencia; sin embargo, personal de seguridad desplegado en el sector explicó que se trata de los preparativos oficiales para el día del evento.
La información para orientar a la población que transita por el centro de la capital ha sido escasa. La Policía no ha brindado datos sobre el dispositivo o restricciones en la zona para los conductores.
Soldados del Estado Mayor desplegados en el área confirmaron la restricciones en las vías y la cantidad de días, por lo que recomendaron a los automovilistas buscar otras rutas.
“El tema del cierre (de calles) lo está trabajando el Viceministerio de Transporte (VMT), y de alguna forma sería bueno que lo contactaran directamente. Los trabajos de nosotros se concentran frente al Palacio Nacional”, explicó a El Diario de Hoy Francisco Merino, delegado del presidente electo en la comisión de traspaso.
Mientras que al encargado de Comunicaciones del VMT se le consultó vía telefónica sobre el plan de tráfico para el centro de la capital ante el cierre de calles, pero respondió que “por el momento no tenía información y que llamaría (a esta redacción) para responder”. Al cierre de esta nota, no correspondió la llamada.
Durante un recorrido el lunes por la tarde entre la Plaza Gerardo Barrios y el Palacio Nacional, un grupo de hombres trabajaba en montar el escenario y otros arreglos relacionados al traspaso de mando de la presidencia de la República.
El área estaba delimitada con vallas metálicas y solo puede ingresar el personal del Estado Mayor y trabajadores. La escena inusual atrajo la curiosidad de las personas que transitaban por la zona, quienes se detenían para observar la faena de los obreros.
Merino explicó que tienen previsto que las labores duren hasta el 30 de mayo para que el 1 de junio todo esté listo.
“Entiendo que desde hoy (lunes) se comenzaba a trabajar sobre el entarimado y escenario”, dijo Eduardo Cálix, jefe de protocolo de la Asamblea Legislativa quien, además, manifestó desconocer sobre las calles que estarían cerradas a raíz de los preparativos.
Merino afirmó que en los próximos días se ampliarán los detalles sobre los avances “tanto de la logística como también la parte de las confirmaciones de las misiones especiales que van a participar”, en la entrega del poder.
La primera toma de posesión presidencial en el Centro Histórico
Esta es la primera vez que el traspaso de mando de la Presidencia de la República se realiza en el centro de la capital.
El pasado 30 de abril, los diputados de la Asamblea Legislativa aprobaron $1 millón de dólares de presupuesto para la ceremonia de traspaso de mando de Sánchez Cerén a Nayib Bukele.
Los fondos fueron avalados luego de que, días antes, la Junta Directiva de la Asamblea acordó que el acto oficial se realizara en el centro de San Salvador a las 9:00 de la mañana.
El Congreso se involucró en la organización del evento, luego que, a inicios de abril, la Cancillería informara sobre retrasos para coordinar el proceso de traspaso.
La cartera de Estado envió una carta al Presidente de la Asamblea, Norman Quijano, para que ese Órgano de Estado se encargara de los preparativos del evento, ya que había un “desfase” de tiempo.
Ese desfase ocurrió luego que el 27 de marzo el presidente electo, Nayib Bukele, diera a conocer que había ordenado a sus representantes “suspender todo contacto con el Gobierno”, pese a eso una segunda reunión fue convocada para el uno de abril, pero las delegadas de Bukele no se presentaron.
FUENTE: elsalvador.com